¿Fue complicado regresar a las competencias después de la lesión que sufriste?
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Me generó miedo. En octubre del 2015 me fracturé el codo izquierdo en el Grand Prix de Manchester (Inglaterra) y recién pude volver el tatami de competencia en enero pasado. Para contrarrestar ese temor, mi entrenador (el español Antonio Ramos) me organizó algunos combates evaluativos en Mallorca, un mes antes de ir al Open de Canadá.
¿Esperabas avanzar hasta semifinales en Canadá?
Ese torneo era una prueba para mi brazo izquierdo. Inicialmente estaba nerviosa, pero tras un minuto de combate, pude bloquear los golpes y no sentía dolor. Me olvidé de la lesión, comencé a pelear con normalidad y no paré hasta la medalla de bronce. Sin darme cuenta, había recuperado la confianza y estaba preparada para el Preolímpico de México.
¿Ya habías superado la temprana eliminación que sufriste en los Panamericanos de Toronto 2015?
Me afectó bastante ser eliminada en primera ronda. No lo esperaba, yo era una de las favoritas para llegar al podio. Estaba en un gran nivel -venía de ser quinta en el Mundial de Rusia-, pero la presión me afectó, no pude manejarlo. Pensé que había llegado a mi techo, que ya no podía dar más. Viajé a Toronto como una heroína y al perder desaparecí. Eso me afectó, pero superé esos pensamientos negativos gracias a mi familia, al Club Élite Taekwondo Ramos & Brigitte (España) y a mis amigos.
Al Preolímpico de México llegaste bien preparada.
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Con todo lo vivido, decidí apoyarme en las personas más cercanas. Fortalecerme con sus energías positivas. Cuando salté al tatami en Aguascalientes (México), sentía mis piernas sueltas, rápidas y fuertes. Estaba bien mental y físicamente. Fui paso a paso y cumplí uno de mis objetivos deportivos, clasificar a los Juegos Olímpicos. Fueron momentos de mucho júbilo.
¿Tienes una meta en los Juegos de Río 2016 ?
Apunto a una medalla, lo veo posible por la asesoría que tengo en Mallorca. La estrategia será como la del Preolímpico: enfocarse en la pelea que me toca y no pensar en lo que podría venir después. La ventaja es que las 16 taekwondistas clasificadas nos conocemos. Nos enfrentamos en los Grand Prix, así que el nivel en Río será parejo.
