El argentino Huracán se clasificó para la etapa de grupos de la Copa Libertadores de América al igualar 0-0 como local con el peruano Alianza Lima, en un partido desquite de la ronda de repechajes jugado este martes en el estadio Tomás Adolfo Ducó, en Buenos Aires.
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Huracán no tuvo problemas para sellar su boleto, ya que había ganado por un holgado 4-0 en suelo limeño en partido de ida, y le bastó con lo hecho en ese encuentro para dejar fuera de carrera al conjunto blanquiazul peruano.
El equipo argentino, que entró en este certamen como campeón de la Copa Argentina-2014, vuelve a disputar una etapa de grupos de la Libertadores 41 años después de su única participación, en 1974.
Huracán ingresará en el Grupo 3 de la Libertadores, en una zona en la que se presentará el 24 de febrero en Venezuela, frente a Mineros, y en la que también están el brasileño Cruzeiro y el boliviano Universidad de Sucre.
El encuentro desquite comenzó con una singular protesta de parte de los jugadores de Alianza Lima, que se mantuvieron estáticos en los primeros segundos de juego en repudio a la agresión que sufrieron tres integrantes del plantel por fanáticos hace una semana, tras la goleada sufrida ante Huracán en Lima.
Huracán fue quien tomó el control del juego y el que generó varias situaciones para ponerse en ventaja, primero con un cabezazo de Eduardo Domínguez que rebotó en el palo derecho, y luego con un remate débil de Torassa en el epílogo de una muy buena jugada colectiva.
Del otro lado, el equipo dirigido por el uruguayo Guillermo Sanguinetti se mostraba muy tibio en el ataque, con los pelotazos para Guevgeozian como única variable, o con remates de media distancia inofensivos, a cargo de Míguez y Cueva.
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Sin embargo, Alianza Lima mejoró con el transcurso de los minutos, pasó a emparejar el desarrollo y tuvo una muy buena oportunidad cuando Landauri se escapó por la izquierda, pero no consiguió definir con precisión cuando estaba solo frente al arquero, mientras que el local volvió a generar zozobra con un zurdazo apenas alto de ‘Wanchope’ Ábila.
Aun sin posibilidades de revertir la serie, Alianza Lima mostró vergüenza y amor propio para, al menos, llevarse un resultado decoroso de su paso por Buenos Aires, y en la segunda mitad tuvo ocasiones para quedarse con la victoria, con un cabezazo de Guevgeozian apenas alto.
El local también pudo quedarse con los tres puntos, pero esta vez al ‘Globo’ le faltó la contundencia que había tenido en Lima, y chocó contra los postes o la seguridad de Forsyth, que se reivindicó con un par de buenas intervenciones.
Con espacios en ataque, Ábila se mostró siempre peligroso, pero el delantero de Huracán desvió un remate cruzado a pocos metros del arco; luego estrelló un derechazo en el poste izquierdo, y casi en el epílogo, Forsyth se estiró para descolgarle un remate de tijera.
Aunque el encuentro tuvo intensidad y ritmo, Huracán y Alianza Lima no se sacaron ventajas, pero el que se quedó con la sonrisa fue el equipo argentino, que vuelve a disfrutar la posibilidad de jugar un torneo internacional tras más de cuatro décadas de ostracismo.