Luego de que se anunciara que las entradas para el partido por clasificatorias entre Perú y Uruguay no se venderán en el Estadio Nacional, la Policía desalojó de los alrededores del coloso a las personas que llevaban días acampando para adquirir boletos.
PUBLICIDAD
La operación policial implicó el desalojo de aproximadamente medio centenar de personas que se habían instalado desde hace tres días en las afueras del recinto deportivo y contó con el apoyo del serenazgo de Lima.
Al cabo de pocos minutos, las aproximadamente 30 carpas fueron desarmadas por sus dueños, quienes desaparecieron del lugar sin ofrecer resistencia.
‘Las entradas ya no se venderán en el Estadio Nacional y no es porque la gente esté acampando, sino que la FPF y le empresa encargada de la venta quieren dar mayor comodidad y seguridad al público a fin de evitar aglomeraciones’, indicó el presidente de la FPF, Manuel Burga, a radio Unión.
La disposición de no vender los boletos en el mismo Estadio habría sido ordenada ante la sospecha de que las personas instaladas en carpas serían revendedores.
En primera instancia, las entradas estarían a la venta desde el 30 de este mes, pero luego de esta medida se podría postergar unos días más.
El directorio de la federación se reúne hoy para definir el precio, fecha y lugar donde se ofrecerán las entradas para el encuentro por clasificatorias; aunque desde ya hay dos posibilidades: una cadena de venta de boletos para espectáculos o vía internet.