No puede estar más contenta la triatleta peruana Mónica Chávez. Tiene motivos de sobra: el domingo pasado quedó segunda (con un tiempo de 5 horas, 38 minutos y 36 segundos) en el difícil Ironman 70.3 de Panamá, actuación que le permite clasificar al Mundial de Triatlón que se disputará el 9 de setiembre en Las Vegas (EE.UU.).
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‘Lo más difícil y extraño fue nadar 1.900 metros en el Canal de Panamá. Difícil porque mi fuerte no es el nado, pues aprendí a nadar a conciencia recién el 2010. Y extraño porque, contra todo pronóstico, salí primera de esa etapa. No lo podía creer’, comenta Chávez, quien completó esta etapa en 29 minutos.
Pero Chávez no solo luchaba contra su poca experiencia en el nado, sino también con un esguince al tobillo que arrastra desde el año pasado.
‘Para subir a la bicicleta tuve que correr descalza cerca de un kilómetro. No me importó el dolor. La emoción de poner la bandera peruana en el podio y luego en el Mundial pudo más’, dice Chávez, que cuenta con el apoyo de Publimetro.
Además, nos comenta que tras haber culminado los 90 km de ciclismo (etapa en la que quedó sexta) tuvo dificultades para respirar bien.
‘Los 21 km de maratón los corrí hiperventilada. En bicicleta conté a las cinco que me habían pasado. Corrí con la meta fija de pasarlas una por una y dejar al Perú en alto’, recuerda Mónica. A la única que le faltó superar fue a la venezolana Adriana Prieto, que llegó primera con 18 minutos y 36 segundos de ventaja sobre nuestra deportista.
Pero esta excelente performance va más allá de un logro personal, dice Chávez, quien remarca que ahora nos ven con otros ojos afuera. ‘Antes me preguntaban si en nuestro país hacíamos triatlón. Ahora es distinto, la gente nos respeta’.
Mónica sabe que la prueba de fuego será en setiembre bajo casi 42 grados en Las Vegas. ‘Soy la única peruana que ha estado presente en los dos últimos mundiales en EE.UU. y repetiré esta vez. Ahora quiero poner la bandera del Perú en lo más alto del podio. Quiero ser campeona del mundo y me preparo para eso’, dice con seguridad.