Esto no tiene precio. El jugador ruso Vadim Evseev del Belarus Torpedo Zhodino tenía en mente retirarse ovacionado, pero estamos seguros de que más acaparó su pecho la emoción de ver la sonrisa de un niño de 5 años por entrar a un campo de juego.
Esto fue iniciativa del centro de caridad para niños rusos. La alegría e ilusión del pequeño estallaron cuando al ‘llevarse’ a toda la defensa contraria, metió un zapatazo y anotó un gol. Las imágenes hablan por sí solas.