Con una ventaja de tres golpes en la tercera ronda, ya en su hoyo 15, nada peor le pudo haber sucedido a Woods. El golfista no pudo evitar ser perturbado por el grito de una mujer. Según refieren los medios que cubren el Arnold Palmer en Bay Hill, un torneo por invitación, la mujer emitió tremendo grito porque un adolescente se había desmayado junto a un puesto de comida cercano al lugar donde se encontraba Tiger.
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Woods dijo que “intentó detenerse, pero ya había pasado el punto en el cual podría haberlo hecho”. Igual fue por el balón, que dicho sea de paso cayó completamente fuera de los límites del campo y terminó en el patio de una casa aledaña.
