Pasar un día entre el sol, la playa y el mar puede hacer que olvides todos tus problemas, te sientas relajada y con la energía recargada pero más allá de tratarse de una vacación ideal para descansar, se trata de todo un proceso químico que le hace bien a tu cerebro.
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Estar frente al mar es lo más cercano a una hipnosis, un espacio relajante donde la brisa, el aroma y los colores del agua nos transportantan a un lñamado “gimnasio azul” (Blue Gym) que trae grandes beneficios para nuestra mente y espíritu. ¿Quieres saber de qué se trata?
La experta en epidemiología, Lora Fleming de la Universidad Exeter, en Inglaterra se ha encargado de estudiar cómo los espacios acuosos naturales pueden servir para curar enfermedades y llevar bienestar fìsico y emocional a las personas. Para comprobar la sensación de bienestar que trae la playa, se realizó una encuesta donde los participantes eran expuestos a fotografías del mar, campos verdes y ciudades y se les preguntó cuánto estaban dispuestos a pagar por una habitación de hotel en cada una de esas vistas. Por supuesto, la gente estaba dispuesta a pagar más por la habitación en la playa.
Pero más allá de ser el lugar ideal para vacacionar, es un espacio que, de acuerdo con el estudio, las personas que viven cerca del mar tienen menores niveles de estrés y se sienten más motivados a hacer ejercicio.
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Otros experimentos realizados durante el estudio de dicha universidad, colocaban pantallas con paisajes de playas en un consultorio dental mientras los pacientes eran intervenidos. Sorpresivamente, aunque se encontraban en una situación estresante, afirmaron sentir menor dolor frente a las imágenes y sonidos relajantes del mar.
Existen terapias como la talasoterapia, basadas en acercar a los pacientes a elementos marinos como el agua de mar, las algas, la arena o los sonidos de las olas. talasoterapia, que se basa en el uso de diferentes elementos marinos (agua de mar, algas, barro, etc.) como agentes terapéuticos.Otros beneficios que trae estar cerca del mar son:
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Explosión de creatividad
Los espacios azules te hacen más creativa ya que tu cerebro se relaja, logrando que te concentres mejor y que te sientas motivada a trabajar. Así que si vas a la playa no olvides llevar un cuaderno y pluma ¡o un libro de mandalas con muchos colores!
Adiós estrés
Nadar o meter los pies en la orilla del mar es la mejor forma de relajar tu mente y cuerpo ya que el agua posee iones positivos que te pondrán de buen humor. Además, combinado con la ionización negativa de la brisa marina, los niveles de serotonina (hormonas de la felicidad), disminuyen tus niveles de estrés. Si nadas, considera que estarás haciendo un gran ejercicio que mejorará tu oxigenación y circulación lo cual te llevará a relajar los músculos cuando te vayas a dormir.
Reduce la depresión
El sonido de las olas tiene un efecto relajante que te ayuda a entrar en un estado demeditación y te lleva a tener mayor claridad mental ante lo que te aqueja,
Mejora tu respiración
Aunque a veces sientas que es molesto sentirte pegajosa y que se te pega toda la arena con la brisa marina, en realidad es una especie de spray natural muy rico en yodo el cual es perfecto para regular la glándula tiroides. ¿Sientes que respiras mejor cuando estás en la playa? Es por el grado de humedad que ayuda a la expulsión de moco.
