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La incorporación del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN) al Ministerio de Salud (Minsa) no afectará la continuidad de Plan Esperanza porque es una política nacional que tiene un presupuesto asegurado, señaló hoy la ministra de Salud, Patricia García.
Detalló que el Plan Esperanza es financiado por el Seguro Integral de Salud, Fondo Intangible Solidario en Salud y de una partida presupuestal del Ministerio de Economía y Finanzas.
Asimismo, dijo que el proceso de transferencia del INEN al Minsa beneficiará a la población, al simplificar los procesos administrativos y darle independencia técnica al INEN para la atención oncológica.
‘Hemos sido muy cautelosos al momento de tomar esta decisión, porque estamos reordenando el sistema de salud. El informe de la Comisión de Transferencia de Salud durante el cambio de gobierno recomendó también revisar la economía financiera de esta entidad al no lograr lo esperado por este instituto especializado, pese a su autonomía presupuestal’, remarcó.
En ese sentido, señaló que el Minsa recuperará el rol como ente rector para asegurar la fiscalización del gasto y, en este proceso de trasferencia, se contará con la supervisión de la Contraloría General de la República.
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‘Hemos encontrado duplicidad de oficinas y funciones, crecimiento burocrático, incremento de infecciones intrahospitalarias e índice de mortalidad, así como el gasto por paciente atendido. Necesitamos mejorar los servicios oncológicos, por lo que el Minsa podrá fiscalizar de forma más coordinada’, aseveró.
En otro momento, aclaró que todos los organismos desconcentrados – categoría a la que pertenece ahora el INEN– manejan su propio presupuesto, sus donaciones y transferencias, así como la atención especializada y continuidad de las investigaciones médicas.
Finalmente, la ministra García desmintió una supuesta falta de medicamentos oncológicos por este proceso de transferencia, debido a que ‘estas compras se realizan de manera corporativa por el Minsa y una pequeña parte está a cargo del INEN’.
