El obispo auxiliar de Lima, monseñor Raúl Chau Quispe, hizo votos hoy porque el Señor de los Milagros ilumine la vida y el trabajo de quienes tienen la responsabilidad de gobernar el país para que tengan siempre el anhelo de buscar el bien de los más olvidados y los más necesitados.
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“No pidamos bienes materiales ni privilegios sino el don de la fe que ilumine nuestras vidas”, dijo el religioso durante la homilía de la Misa por la nación oficiada hoy en el templo de las Nazarenas, con asistencia del jefe de Estado, Pedro Pablo Kuczynski, el primer presidente que acude a ese oficio religioso después de 32 años.
“La fe hace posible las cosas humanamente imposibles en cualquier realidad. La fe nos da la certeza de que no estamos solos en el dolor, en la enfermedad, en la incomprensión”, recalcó.
El obispo pidió también que elevemos nuestros pensamientos al Señor de los Milagros “para que nos ayude a no ser indiferentes con nuestros hermanos de las zonas más alejadas, sino que seamos sembradores de semillas de esperanza, generosidad, solidaridad, confianzas, verdad, justicia y caridad”.
Pidió igualmente al Cristo Morado que le conceda al presidente PPK, quien mañana cumple años, tener un gobierno sabio “para que sus decisiones sean iluminadas por la verdad”.
“Líbralo de todo mal y regálale la alegría de contemplar que todos colaboramos para seguir construyendo un país más justo, unido y en paz”, dijo el religioso.
Al oficio litúrgico asistieron también la presidenta del Congreso, Luz Salgado; los ministros de Desarrollo e Inclusión Social, Cayetana Aljovín; de Educación, Jaime Saavedra; de Defensa, Mariano Gonzalesy de Trabajo, Alfonso Grados, entre otras autoridades.
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Condecoración
Al término de la misa, PPK impuso la condecoración de la Orden del Sol en el Grado de Gran Comendador a la monja de clausura Soledad García, responsable del monasterio de las Hermanas Nazarenas, en reconocimiento a los servicios distinguidos.
Hace 50 años la madre nazarena llegó al Perú junto a otras tres monjas españolas para el monasterio a pedido del entonces cardenal Juan Landázuri ya que el monasterio se encontraba en problemas. Dos de ellas regresaron a su país y las otras dos se quedaron, hace seis años falleció la madre María Rosa del Pilar y la madre Soledad o María Soledad de Nuestra Señora de Guadalupe sigue como priora del monasterio.
Vía Andina
.- Gracias a todos los que colaboraron con la Reciclatón.
