Los surcoreanos enfrentan una amenaza a su seguridad: caminar por la calle y enviar mensajes de texto simultáneamente.
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En los últimos cinco años, el país vio duplicarse el número de colisiones entre peatones y vehículos por causa de los teléfonos inteligentes, por lo que las autoridades lanzaron una campaña para trasladar la atención de los transeúntes de la pantalla de sus dispositivos… al tránsito de Seúl.
Algo que no siempre logran.
‘Uso mi smartphone frecuentemente cuando camino para chequear mensajes pero el cartel era demasiado pequeño como para verlo’, dijo un peatón.
Muchos de los carteles fueron impresos en el suelo, la dirección a la que miran los distraídos peatones conectados.
“No creo que resulte muy efectivo. Deberían hacerlo más llamativo’.
Ochenta por ciento de los surcoreanos tiene smartphones, que pasan en promedio cuatro horas chateando con sus dispositivos.
La primera tanda de unos 300 carteles previstos para la capital ya está instalada, para desmotivar a los peatones que insisten en perfeccionar al arte de caminar y tipear al mismo tiempo.
