“Donald Trump” arde en llamas en México por Semana Santa

Imágenes del controvertido precandidato a la presidencia estadounidense Donald Trump fueron quemadas este sábado en Ciudad de México y otras localidades como parte de la tradicional “quema de Judas” de Semana Santa.

En un barrio popular del centro de Ciudad de México, unas 200 personas se reunieron al caer la noche para ser testigos, con expresiones de júbilo, de la quema de un “Judas Trump” de más de dos metros de altura.

La imagen de rostro sonriente, vestido de traje azul, camisa blanca y corbata roja, se fue consumiendo por las llamas mientras de sus pies y otras partes del cuerpo estallaba la pirotecnia.

Recomendados

Pilar Mazzetti sobre no atención de adultos mayores en UCI: “No estamos en ese momento”

Congreso cita al gabinete a “sesión presencial” la próxima semana

Martín Vizcarra no se pronunciará en el día 61 de la cuarentena

El artesano Felipe Linares, que desde hace más de 50 años hace Judas con una mezcla de papel, harina, agua y varillas de carrizo, optó este año por Trump debido a la animadversión que despierta entre los mexicanos por sus agresivas declaraciones contra este país.

“Ahora vamos a quemar a Trump porque no lo queremos, habla muy mal de los mexicanos”, comentó días atrás Linares a la AFP.

Como parte de las tradiciones de Semana Santa y para alejar el mal y hacer justicia por la muerte de Jesús, el Sábado de Gloria los mexicanos queman distintas figuras, como diablos, personajes políticos o deportistas erigidos en villanos y que emulan a Judas Iscariote, quien según los textos bíblicos traicionó a Jesús.

Esta es la primera vez que en el taller de los Linares un político estadounidense es convertido en Judas.

En otras ciudades como Monterrey (norte) y Puebla (centro) también fueron quemados Judas con la imagen de Trump.

Según una encuesta, 61% de los mexicanos tiene una mala opinión de Trump, quien ha señalado a los mexicanos de narcotraficantes y violadores y advierte que si llega a la presidencia obligará a México a pagar la construcción de un muro en los más de 3.000 km de frontera.