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El alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, presentó la Primera Brigada del Serenazgo de Lima equipada con armamento no letal que a partir de mañana miércoles colaborará en el mantenimiento del orden público y la seguridad ciudadana en apoyo de la Policía Nacional.
Esta primera brigada está conformada por 30 serenos e igual número de pistolas de defensa de calibre 18 mm., con capacidad para utilizar munición con gas comprimido con un alcance efectivo de hasta 50 metros. De acuerdo con el burgomaestre, en total la Municipalidad de Lima tendrá a su disposición 100 de estas pistolas para equipar a otras brigadas de serenos.
“Nuestro objetivo es cautelar la vida de las familias limeñas y cooperar con los esfuerzos que hace la Policía Nacional para que no se produzcan actos delincuenciales en la ciudad”, indicó Castañeda, quien dijo que el equipamiento de armamento no letal para los serenos no contraviene ninguna norma.
El burgomaestre señaló que los serenos, todos supervisores, fueron capacitados luego de aprobar un examen psicológico, en cursos relacionados con el manejo de emociones; derechos humanos; uso legítimo de la fuerza; ley del arresto ciudadano, entre otros.
Acotó que las armas no letales solo serán usadas como último recurso para la defensa del agente del Serenazgo y servirán para aturdir a un delincuente con un proyectil de gas irritante, permitiendo así que pueda ser intervenido por los agentes del orden.
Videovigilancia
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El alcalde también mostró la nueva central de videovigilancia de la Gerencia de Seguridad Ciudadana donde ya funcionan las primeras 300 cámaras de vigilancia que fueron instaladas en calles y puntos estratégicos del centro de la capital.
Estas se suman a las 196 cámaras de videovigilancia colocadas en la vía troncal del Metropolitano, y a otras 40 cámaras que vienen siendo instaladas en todo el tramo de ‘Línea Amarilla’, proyecto que une el límite con el Callao hasta la Vía de Evitamiento.
En la presentación también se anunció el Plan de Operaciones de Seguridad Ciudadana que desplegará la comuna para resguardar las calles del Centro Histórico, Barrios Altos y zonas aledañas, durante la Semana Santa a fin de garantizar la seguridad de los vecinos y el público flotante que acude en mayor cantidad para visitar Iglesias y asistir a distintas procesiones.