Nadine, la robot que tiene el nombre de nuestra primera dama, es un andoide que puede entablar una conversación como si fuera una persona de carne y hueso.
La robot creada en Singapur puede trabajar como una acompañante social, porque también demuestra sentimientos. Sus creadores ,miembros de la Universidad tecnológica de Nanyang, creen que puede laborar con niños y ancianos.