Por Mauricio Niño
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El chef japonés Toshiro Konishi, que ya es por mérito propio una institución de la gastronomía en el Perú, no quiere encasillar el estilo de su nuevo restaurante Oishii en Miraflores.
‘Mucha gente habla de comida nikkei o fusión. Lo único que hacen es mezclar un montón de cosas y ponerle una salsa encima. Yo no quiero ponerme una bandera. Esta es mi comida y mi estilo’, le cuenta Toshiro a Publimetro entre risas.
La carta de Oishii es producto de años de investigación. Hace casi dos décadas, Konishi se embarcó, junto a cinco pescadores, en un viaje a lo largo de la costa peruana. Recorrió sus 2.500 kilómetros desde Tumbes hasta Tacna en 78 días para conocer todo lo que nuestro mar podía ofrecerle.
‘El Perú tiene infinidad de materias primas, que son lo más importante en la gastronomía. Los cocineros no aprenden esto en el mercado ni las escuelas. Eso se aprende en el mar y en las chacras’, afirma.
El popular ‘achica precio’ dice que cada uno de sus platos está preparado con ingredientes cultivados, cosechados y pescados ‘con cariño’. Y este cuidado rinde sus frutos. Puedes sentirlo, por ejemplo, en la sutileza del sabor del pescado en su carpaccio de atún, preparado con una emulsión de anguila y aromatizado con ajonjolí.
Toshiro es un chef tradicional, de otra época. ‘La buena comida no corre’, nos dice. Si no estás muy seguro de lo que eso significa, prueba su arroz con mariscos, servido en un pequeño caldero que llega a la mesa sobre una elegante hornilla con motivos japoneses. Así, la cocción continúa y, mientras comes, el arroz del fondo empieza a tostarse, lo que le da un delicado sabor ahumado.
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Toshiro pasó su infancia en la cocina del restaurante de su familia, en la prefectura de Miyazaki. En su juventud viajó a Tokio para estudiar cocina tradicional japonesa. Hoy, se confiesa como un gran aficionado a la comida criolla peruana.
Por eso, la carta de Oishii ofrece platos de su país como el gyoza nasu, de berenjena japonesa rellena de cerdo y langostino con salsa oriental, o el yakimeshi de langostino, con arroz salteado al wok, verduras, pecanas, ajonjolí tostado y fideo de arroz frito; y también reinterpretaciones de platos peruanos como el arroz con pato Oishii, que le da un giro oriental al clásico norteño.
También cuenta con opciones de postres, como el mousse de lychee con vodka de vainilla o el tempura de frutas de estación, salsa tofee y helado de la casa. Los puedes acompañar con alguna de las variedades de té que ofrece. Si quieres algo distinto, prueba el té negro de perlas de la noche, preparado a base de flores.
Oishii está ubicado en Av. Armendáriz 480. El ticket promedio oscila entre S/.80 y S/.120. Abre de lunes a sábado de 12:30 p.m. a 3:30 p.m. y de 7 p.m. a 11 p.m; y los domingos de 12:30 p.m. a 5 p.m.
