El Cuarteto para el Diálogo Nacional tunecino se conformó por dirigentes de la UGTT, sindicato histórico y símbolo de la independencia, la patronal Utica, la Liga Tunecina de Derechos Humanos y la Orden de los Abogados.
La alianza organizó un largo y complicado “diálogo nacional” entre los islamistas y sus opositores, obligándolos a sacar el país de su parálisis institucional.