El presidente Ollanta Humala fue atacado con arenas y piedras por pobladores del distrito de Nuevo Chimbote, en Áncash. El mandatario había llegado al lugar para inaugurar una obra de agua y alcantarillado.
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Cuando bajaba del estrado en el que se encontraba para develar la placa correspondiente, fue interceptado por los lugareños, quienes le gritaban “traidor”.
‘Al presidente le llegó a caer (arena), su pelo estaba con arena, tenía arena en el cabello’, declaró un periodista de RPP, medio que difundió la noticia.
Finalmente, el presidente tuvo que abandonar el lugar escoltado por agentes de seguridad.
Según Canal N, quienes atacaron al mandatario eran simpatizantes del gobernador regional de Áncash, Waldo Ríos Salcedo. Este último intentó ingresar al estrado donde este se encontraba para hablar con él; sin embargo, no se lo permitieron.
En conversación con RPP, Ríos negó conocer a los pobladores que interceptaron a Humala.
Según consigna Perú 21, el malestar de los ciudadanos se debería a que el mandatario llegó al evento a las 2 de la tarde, a pesar de que un numeroso grupo lo esperaba desde las 10 de la mañana.