El escritor Eduardo Galeano falleció este lunes víctima de cáncer de pulmón. El escritor uruguayo fue reconocido, a nivel internacional, como uno de los pensadores políticos y deportivos más destacados de nuestra región. Aquí le rendimos homenaje recordando algunas de sus frases sobre América Latina, el dinero, los libros, el amor y la vida:
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1.’El mundo se divide, sobre todo, entre indignos e indignados, y ya sabrá cada quien de qué lado quiere o puede estar’.
2. ‘A diferencia de la solidaridad, que es horizontal y se ejerce de igual a igual, la caridad se practica de arriba-abajo, humilla a quien la recibe y jamás altera ni un poquito las relaciones de poder’.
3.’Quien no está preso de la necesidad, está preso del miedo: unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen’.
4.’Este es un mundo que te domestica para que desconfíes del prójimo, para que sea una amenaza y nunca una promesa’.
5.’Ahora América es, para el mundo, nada más que los Estados Unidos: nosotros habitamos, a lo sumo, una sub América, una América de segunda clase, de nebulosa identificación. Es América Latina, la región de las venas abiertas’.
6.’Si la naturaleza fuera banco, ya la habrían salvado’.
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7.’En realidad, todos escribimos un solo libro, que va cambiando y se va multiplicando a medida que la vida vive y el escritor escribe. Para mí, Las venas fue un puerto de partida, no un puerto de llegada’.
8.’Escribo para los amigos que todavía no conozco. Los que conozco ya están hartos de escucharme’.
9.’No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta’.
10.’El miedo nos gobierna. Esa es una de las herramientas de las que se valen los poderosos, la otra es la ignorancia’.
11.’Las paredes son la imprenta de los pobres’.
12.’Habitamos un mundo que trata mejor a los muertos que a los vivos. Los vivos somos preguntones, y somos respondones, y tenemos otros graves defectos imperdonables para un sistema que cree que la muerte, como el dinero, mejora a la gente’.
Sobre la pasión de su vida: el fútbol
1.’Como todos los uruguayos, yo nací gritando gol. Quería ser jugador de fútbol. Jugaba muy bien, era una maravilla, pero solo de noche mientras dormía’.
2.’El fútbol se parece a Dios en la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales’.
3.’Los niños no tienen la finalidad de la victoria, quieren apenas divertirse. Por eso, cuando surgen excepciones, como Messi y Neymar, son entonces, ellos, para mí unos verdaderos milagros’.
4.’En su vida, un hombre puede cambiar de mujer, de partido político o de religión, pero no puede cambiar de equipo de fútbol’.
5.’Por suerte todavía aparece en las canchas, aunque sea muy de vez en cuando, algún descarado ‘carasucia’ que se sale del libreto y comete el disparate de gambetear a todo el equipo rival, y al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la prohibida aventura de la libertad’.
6.’A medida que el deporte se ha hecho industria, ha ido desterrando la belleza que nace de la alegría de jugar porque sí’.
7.’El portero siempre tiene la culpa. Y si no la tiene, paga lo mismo. Cuando un jugador cualquiera comete un penal, el castigado es él: allí lo dejan, abandonado ante su verdugo, en la inmensidad de la valla vacía. Y cuando el equipo tiene una mala tarde, es él quien paga el pato, bajo una lluvia de pelotazos, expiando los pecados ajenos’.
8.’El juego se ha convertido en espectáculo, con pocos protagonistas y muchos espectadores, fútbol para mirar, y el espectáculo se ha convertido en uno de los negocios más lucrativos del mundo, que no se organiza para jugar sino para impedir que se juegue’.
9.’El árbitro es el abominable tirano que ejerce su dictadura sin oposición posible y el ampuloso verdugo que ejecuta su poder absoluto con gestos de ópera’.
10.’Jugar sin hinchada es como bailar sin música’.
11.’La tecnocracia del deporte profesional ha ido imponiendo un fútbol de pura velocidad y mucha fuerza, que renuncia a la alegría, atrofia la fantasía y prohíbe la osadía’.
12.’En mi país, en cuanto asomamos por las piernas de mamá gritamos ‘¡Gol! Por eso nuestras maternidades son tan barullentas’
13.’Yo soy un mendigo de buen fútbol, que va por el mundo, sombrero en mano suplicando ‘¡Una juagadita, por amor a Dios!’ y cuando el milagro ocurre agradezco sin que me importe un rábano, el país o el club que no los ofrece’.