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Integrantes del proyecto urbano Redretro, que se encarga de modificar letreros en diferentes Metros del mundo, a partir de la ‘subversión semiótica’ y ‘señalética en transporte Metro’, intervino el sábado pasado dos estaciones de este transporte en la capital mexicana.
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Lo que hace este colectivo es realizar cambios sutiles ‘de carácter poético y crítico en los sistemas de transporte de ciudades de todo el mundo’, con el objetivo de dar paso a un ‘transporte onírico’, modificando temporalmente algunos ‘nombres estratégicos y narrativas públicas’.
Esta vez, las estaciones Normal y Guerreo, de las Líneas 2 y B, de manera respectiva, tuvieron otros nombres, en referencia al caso de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, Guerrero, desde el pasado 26 de setiembre.
En noviembre pasado, también cambiaron la estación Niños Héroes, de la Línea 3, de una forma tan sutil que se pierde con la cotidianidad. Antes lo habían hecho con la estación Tlatelolco, Hidalgo, Aragón, Hangares, entre otras.
