La Defensoría del Pueblo cumplió este jueves 18 años velando por los derechos humanos de los peruanos y emplazando a las autoridades que incumplen sus funciones.
PUBLICIDAD
Para el actual defensor del Pueblo (encargado), Eduardo Vega, esta institución alcanza la mayoría de edad con la experiencia de haber nacido y luchado por la democracia en los tiempos convulsos de los años noventa. ‘Desde entonces, la Defensoría ha cambiado y crecido, pero siempre con el compromiso de un país inclusivo, respetuoso’, declaró Vega.
Esta labor de protección ha hecho que la Defensoría sea una institución especialmente valorada por la ciudadanía. Según Vega, debido a tres pilares fundamentales: su autonomía frente a la política, la continuidad de sus líneas de trabajo y la legitimidad. ‘Todos los defensores han continuado la tarea inicial de la institución. Normalmente, cuando uno nuevo ingresa quiere rehacer todo, pero eso no ocurrió en la Defensoría’.
A lo largo de estos 18 años, el trabajo de la Defensoría estuvo marcado por su papel en las investigaciones de los fallecidos y desaparecidos durante la época del terrorismo, por intervenir buscando soluciones en los conflictos sociales resentados especialmente por temas mineros y ambientales, y por empujar la creación de una ley de consulta previa.
Actualmente, su labor se dirigió especialmente a proteger a las poblaciones más vulnerables para evitar casos de discriminación, trata de personas y trabajo infantil.
La Defensoría se ha convertido para los peruanos en un ente para canalizar sus quejas contra los servicios deficitarios de los municipios, los sistemas previsionales, de salud y educación.
‘Cuando llamamos la atención a alguna autoridad, lo hacemos para que se respeten los derechos de los peruanos’, acotó Vega.
PUBLICIDAD
Pese a su independencia institucional, la Defensoría lleva ya cuatro años esperando a que el Congreso nombre a un nuevo titular, desde que el mandato constitucional de Beatriz Merino acabara en noviembre del 2010.
‘Esto habla de una dificultad para elegir a un titular, porque se requiere el consenso de todas las fuerzas políticas. Creo que a veces eso no se ha terminado de entender’, lamentó este jueves Vega en Radio San Borja.
El papel de la Defensoría
Tiene el mandato esencial de defender los derechos fundamentales, supervisar la administración pública y a las empresas prestadoras de servicios públicos. Este organismo autónomo nació a partir de la Constitución Política de 1993.
Las caras visibles
En estos 18 años ha habido cuatro defensores del Pueblo.
-Titulares. Jorge Santistevan de Noriega (1996-2000) y Beatriz Merino (2005-2010) fueron los únicos elegidos por el Congreso. -Encargados. Walter Albán y Eduardo Vega asumieron como encargados (no como titulares), en diferentes etapas. Suman ocho años. -Elección pendiente. Tras muchas idas y vueltas, a fines de agosto el Congreso al fin definió a nueve candidatos para nombrar al nuevo defensor. Son Eduardo Vega, Samuel Abad, Guillermo Bettocchi, Juan Domingo Cáceres, Abelardo Encinas, Walter Gutiérrez, Guido Lombardi, Óscar Schiappa-Pietra y Víctor Soto Vallenas. La elección debe hacerse en esta legislatura.
