Nuestra ciudad será mañana sede del IV Congreso de las Mejores Prácticas SIBRT de América Latina, un encuentro que reúne hasta el jueves en el hotel Sheraton a alcaldes y funcionarios de transporte de la región, quienes compartirán visiones, estrategias y casos de éxito en torno a este tema.
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Si bien Lima podría ser cuestionada como sede de este evento debido a su caótico sistema de transporte, el secretario general de la Asociación Latino-Americana de Sistemas Integrados y BRT (SIBRT), Luis Gutiérrez, asegura que los limeños estamos viviendo un cambio histórico en la planificación de este servicio.
‘La reforma del transporte de Lima que empezó el 26 de julio es lo más trascendente que ha ocurrido en la ciudad en 30 o 50 años, por ser el inicio de un proceso de recuperación de la ciudad para su gente’.
En ese sentido, Gutiérrez, que es peruano y fue exviceministro de Transporte, emplaza a los limeños a apropiarse de este cambio y poner todo de su parte para lograr que el modelo de buses azules funcione.
‘Los usuarios debemos tomar conciencia de que la reforma es nuestra. Tenemos que ser tolerantes y pacientes para trabajar juntos con las autoridades. De esta manera, la reforma se llegará a concretar con la implantación de un sistema de alta calidad para todos’.
En otros países de la región, esto ya se logró. ‘En Latinoamérica, hay importantes ejemplos en Ecuador, Colombia, Chile, Brasil, Argentina, México, Panamá, Guatemala, Uruguay y Venezuela. Ellos iniciaron hace décadas la reforma de sus sistemas de transporte público masivo’.
En ciudades como Curitiba y Sao Paulo (Brasil), Bogotá (Colombia) y Santiago de Chile, afirma Gutiérrez, un pilar fundamental del cambio fueron los políticos. ‘Son lugares con una clara visión de ciudad gracias a sus políticas de estado y alianzas para implementar sistemas integrados de transporte’.
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El experto adelanta que la SIBRT ha elaborado un estudio para reformar el transporte urbano en las 12 ciudades más pobladas del Perú. El plan incluye proponer una ley de política y financiamiento de la movilidad urbana, así como crear un Ministerio de las Ciudades para gestionar políticas nacionales que apoyen las reformas de transporte.
Este viernes, los participantes del congreso acudirán a la Primera Cumbre de Ciudades líderes en Movilidad Sustentable, a relizarse en el Municipio de Lima.
Tanto el congreso como la cumbre forman parte de las actividades previas por la COP 20, el evento anual de la ONU sobre cambio climático que este año se realizará en Lima.
Megaproyecto de la SIBRT
La SIBRT ha hecho un estudio para reformar el transporte en las 12 mayores ciudades del Perú.
-¿En qué consiste? Se busca implementar un sistema de transporte de calidad y seguro, llegando a los barrios más lejanos de la ciudad. -¿Dónde se aplicaría? Lima y Callao, Arequipa, Trujillo, Chiclayo, Piura, Iquitos, Cusco, Chimbote, Huancayo, Tacna, Juliaca e Ica. -¿Cuánto costaría? US$ 5.751 millones. El Estado aportaría US$ 1.725 millones para infraestructura y el sector privado destinaría US$ 4.026 millones para renovar la flota de buses. -¿Cuándo tardaría en implementarse el plan? De 5 a 7 años. -¿En qué punto se encuentran las conversaciones? El SIBRT ya presentó el estudio al sector privado (proveedores de buses, bancos, empresas constructoras, AFP, etc. ) para que persuadan a las autoridades de la relevancia de este megaproyecto.
Lo que se pierde
-Gastos millonarios. Cada año, el Perú pierde 20 millones de dólares anuales, equivalente al 10% del PBI, por la mala planificación en el sistema de transporte urbano.-En la salud. En afecciones a la salud por efecto de accidentes de tránsito, contaminación del aire e inactividad física, el país pierde anualmente US$8,485 millones (equivalente al 4% de su PBI). -Por malas infraestructuras. Por efecto de las ineficiencias del transporte urbano que significan congestión vehicular, pérdida de combustible e infraestructura mal utilizada, Perú pierde US$7,425 millones al año (3.5% del PBI).-Empleo. Otros factores económicos como oportunidades de empleo e inversión no capturada, se traducen en pérdidas anuales equivalentes a US$4,243 millones (2% del PBI). -Accidentes fatales. Cada año, mueren más de 3.600 personas por accidentes de tránsito en el país. El 80% son peatones.
