Como era de esperarse, la fase de prueba en el inicio de la preoperación del Corredor Complementario Tacna-Garcilaso-Arequipa (TGA) no se libró de contratiempos y malestar del público, e incluso grescas entre grupos de transportistas que querían ingresar con sus vehículos al eje vial sin estar autorizados y los inspectores ediles encargados de evitar que ello ocurra.
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Por ejemplo, en el cruce de las avenidas Arequipa y 28 de Julio, en Lima Centro, una cúster de la empresa Orión intentó ingresar al corredor, pese a no contar con la autorización respectiva. Ello provocó que los inspectores, con apoyo policial, detuvieran su avance y lo obligaron a desviarse.
La negativa inicial del conductor provocó que los representantes de la comuna movilizaran una grúa hasta la zona para remolcar a la cúster. El renuente chofer, lejos de hacer caso, intentó seguir su rumbo, pese a tener personas al frente.
Ante la sorpresa de los inspectores y de los policías presentes, los pasajeros que viajaban en la cúster respaldaban al chofer y se negaban de bajar del vehículo.
En esos momentos se registró una gresca entre transportistas, pasajeros e inspectores, la cual no llegó a mayores incidentes por la intervención de los custodios del orden.
El chofer de Orión accedió a regresar por donde vino y desviarse hacia otra ruta, negándose en todo momento a asumir su responsabilidad por el desorden ocasionado con su fallido intento de ingresar al “Corredor Azul”.
Otro grupo numeroso de personas llegó también a la intersección de las avenidas 28 de Julio y Arequipa, portando pancartas con frases de respaldo a la reforma del transporte emprendida por la comuna metropolitana y a la implementación de los corredores complementarios.
La alcaldesa de Lima, Susana Villarán, calificó el inicio de la preoperación del Corredor TGA como un “día histórico para el transporte público” en la ciudad capital, e instó a la población a sumarse a esta reforma del transporte adoptando la cultura del orden, seguridad y modernidad.
