El Mundial Brasil 2014 culminó y todos los ojos se han posado en la presidenta brasileña Dilma Rousseff y su posible fracaso en las próximas elecciones presidenciales. De acuerdo a la información de la revista Forbes, las próximas elecciones en el vecino país girará entorno a la economía, la cual se está debilitando poco a poco.
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Según el Banco Central el Índice de la Actividad Económica de Brasil (IBC-Br) disminuyó -0.18% mes a mes y -0,2% en el año, superando el consenso, pero no dando a los inversionistas mucho que celebrar.
Por su lado, Vagner Alves, economista de Franklin Templeton aegura que el IBC-Br junio debe ser muy débil y puede indicar una recesión en el segundo trimestre de este año.
“Veo un PIB ligeramente positivo en el tercer trimestre y un rendimiento ligeramente mejor en el cuarto trimestre. Sin embargo, el descenso del 0,5% se confirma en el segundo trimestre, el crecimiento de este año estaría entre el 0,5% y el 0, 7% “, explica el representante de The Templeton que sabe que sus proyecciones son pesimistas.
El IBC-Br es un indicador económico mensual del Banco Central, que es utilizado por los economistas para ayudar a pronosticar el crecimiento del PIB trimestral y anual.
Según la revista Forbes, esta debilidad económica junto a la inconformidad de la clase media hacia el Partido de Trabajadores, podría ser la ruina de Dilma.
“La debilidad económica, junto con la frustración de la clase media con el Partido de los Trabajadores, podría ser la ruina de Dilma. Su partido ha estado en la presidencia por 12 años y los votantes principalmente al sur de Sao Paulo están buscando darle al Partido de los Trabajadores sus papeles de despido en octubre”, indica la publicación.
