Los fuegos artificiales siempre han cautivado al público. Sin embargo, ¿cómo sería la experiencia si se aprecia la experiencia desde el aire? Ahora que están de moda los drones, esta pregunta ya es sencilla de responder.
Utilizando un DJI Phantom 2 equipado con una cámara GoPro Hero 3, el realizador Jos Stiglingh aprovechó los juegos pirotécnicos del 4 de julio (Día de la Independencia de EE.UU.) para captar las explosiones desde varios metros de altura. Resultó una suerte que el sofisticado equipo haya salido intacto entre toda la pólvora quemada.