Según el presidente Ollanta Humala, el bajo crecimiento de la economía peruana registrado en el primer trimestre del año (4,8%) responde a un contexto internacional desfavorable.
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No obstante, los analistas afirman que los problemas internos juegan un papel importante en esta desaceleración. Leonardo García- Polo, country manager de la consultora Falcon MP, por ejemplo, señala que ‘el país atraviesa un proceso de desaceleración y, según advierten algunos expertos, la posibilidad de que este se revierta depende exclusivamente de un buen manejo del Ejecutivo en las futuras negociaciones’.
Para revertir la tendencia, García-Polo considera que el Gobierno deberá enfrentar cuatro tareas en el segundo semestre de este año:
*1 Mejorar la ejecución presupuestal en las regiones**. Perú podría mejorar su competitividad en el panorama internacional si mejora su efectividad en la forma en la que se utilizan sus recursos. Para ello, se requiere de una plataforma que permita acelerar los proyectos regionales y revisar cómo se usan los recursos.
2 Eliminar la corrupción en gobiernos regionales. Mejorar los mecanismos de elección de los presidentes regionales ayudará a acabar con la corrupción y otorgar mayor confianza y seguridad a los inversionistas.
3 Afianzar los bloques regionales. Fortalecernos en la Alianza del Pacífico dará un guiño de estabilidad al sector privado.
4 Solucionar conflictos entre comunidades y la minería. El gobierno deberá enfocarse en los intereses de mediano plazo de los comuneros y anticiparse a identificar a los actores líderes de la comunidad para conseguir dialogar y llegar a acuerdos.