Andina. La Superintendencia Nacional de Migraciones proyecta expedir carnés de extranjería con chip electrónico que impida su falsificación o adulteración, y que contenga información biométrica (huella digital, imagen actualizada del rostro y datos esenciales) de su titular, comentó Rosa Prieto, superintendenta de migraciones a la agencia Andina que junto con la expedición de este moderno documento se prevé la descentralización de la atención para agilizar los trámites.
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En ese sentido, dijo que se ampliará la cobertura actual de una oficina (la sede central en Lima) a trece oficinas ubicadas en igual número de jefaturas zonales, a fin de que los ciudadanos extranjeros que se encuentran en provincias no tengan que trasladarse necesariamente a la capital para gestionar su carné.
La funcionaria afirmó que se están afinando los detalles del costo que demandará la producción de este nuevo carné de extranjería y ver si el presupuesto con el que se cuenta para este año permitirá concretar este proyecto.
En caso que existan limitaciones presupuestales, se podría solicitar un crédito suplementario al Ministerio de Economía y Finanzas, o priorizar las necesidades institucionales para redireccionar recursos para dicho fin, manifestó.
Según estadísticas de la Superintendencia de Migraciones, en el año 2013 se emitió un total de 13,314 carnés de extranjería. Los ciudadanos extranjeros a los que se expidió el mayor número de carnés fueron los colombianos (23.03%), seguido de españoles (14.14%), estadounidenses (7.76%), argentinos (7.23%) y chilenos (5.93%).
De acuerdo al tipo de calidad migratoria, se expidió con mayor porcentaje la de trabajador (56.41%), seguida de familiar de residente (29.30%), religioso (8.65%), estudiante (1.67%), inmigrante (1.66%), entre otros.
En comparación con el año 2012, el número de carnés de extranjería emitidos se incrementó en 3,611 documentos, lo que representa una variación del 37.22%.
Prieto Gómez destacó que a fin de mejorar la atención de los ciudadanos extranjeros, se ha modificado los horarios, de tal manera que por la mañana se atiende casos de prórroga de residencia y por la tarde los cambios de calidad de migratoria, que son los trámites con mayor demanda.
