El presidente interino de Ucrania, Alexándr Turchinov, *dio un ultimátum a los activistas prorrusos sublevados en el este del país, para que hoy a más tardar depongan las armas y se rindan.
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Turchinov advirtió que el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania ha decidido comenzar una ‘operación antiterrorista de envergadura con el empleo de las fuerzas armadas’ en las regiones orientales del país, donde activistas prorrusos han tomado una serie de edificio públicos.
‘El gobierno de Ucrania no permitirá la repetición del guion de Crimea en las regiones orientales de Ucrania’, recalcó Turchinov, en alusión a la reciente anexión de esa región ucraniana por la Federación Rusa.
Aseguró que las autoridades ucranianas han hecho todo por evitar el derramamiento de sangre, pero están dispuestas a rechazar ‘con las armas en la mano los intentos de invasión y desestabilización, así como las accionesterroristas’.
Ante este anuncio, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia envió un comunicado señalando que depende de Occidente que se evite una guerra civil en Ucrania. Según Rusia, los países europeos y Estados Unidos que apoyaron las protestas en Kiev están obligados a poner bajo control ‘a sus pupilos’.
El ministerio ruso propuso también que se examine de manera ‘urgente’ la situación de crisis en esas regiones en el Consejo de Seguridad de la ONU y en la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). Debido a ello, el Consejo de Seguridad se reunió ayer por la noche a puertas cerradas para analizar ‘la mejor solución’ para la crisis en el sureste de Ucrania.
Más revueltas Activistas prorrusos ocuparon ayer el ayuntamiento de Yenakievo, a 50 kilómetros de Donetsk, donde ondean ahora las banderas de Rusia.No descansan. Los manifestantes también bloquearon el edificio del ayuntamiento de la región de Jarkov, en el este de Ucrania.¿Por qué? Los activistas exigen anexarse a Rusia, tal como lo hizo Crimea.