Por: Luciana Alva Ramírez
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El pasado miércoles 5 de febrero, cerca de 1.400 personas se reunieron en el Parque Reducto de Miraflores para conocer ideas relacionadas al cuidado del medio ambiente, en el primer volumen temático del evento Pecha Kucha Night que se realiza en Lima.
Entre las empresas y organizaciones que describieron sus ideas en presentaciones de 20 imágenes (y 20 segundos cada una), se encontraba B-Green, Green Marketing & Consulting, la primera consultora peruana especializada en promoción e implementación de prácticas de ecoeficiencia en empresas, la cual acaba de cumplir un año operando en el país.
‘La cultura ambiental en el Perú está creciendo lentamente, pero ya se ven los cambios en relación a lo que se vivía hace unos años. Ya es común hablar de reciclaje, de contaminación ambiental, de la importancia del ahorro energético y del ahorro del agua’, explica Micaela Venancio, cofundadora de B-Green. ‘Podemos ver también una tendencia creciente en el consumo de productos orgánicos y/o naturales, y eso se debe a que la gente ya se da cuenta de que un ambiente contaminado afecta directamente a nuestra salud’, agrega.
Pero no es solo eso. Hoy en día, según cuenta, las empresas también se han visto obligadas a adecuarse a las políticas ambientales nacionales e internacionales cada vez más exigentes.
Al identificar esta creciente necesidad por las prácticas ecoeficientes y comunicarlas adecuadamente a sus clientes, Micaela Venancio y Claudia Vega, ambas ingenieras forestales con especializaciones en marketing comercial, junto a Mario Panduro, diseñador y comunicador ambiental, lanzaron B-Green en enero del 2013, luego de nueve meses de estudio del mercado y diseño de servicios.
Un año después del lanzamiento, Micaela recuerda los retos por los que pasaron para fundar una empresa con un enfoque único en el mercado peruano. No obstante, asegura que valió la pena correr el riesgo.
‘Nuestro país requiere propuestas nuevas, frescas, arriesgadas. Abrirse camino en un tema nuevo no es fácil, lo decimos por experiencia, pero vale la pena intentarlo’, explica Venancio.