En un recurso presentado el jueves y dirigido a la jueza californiana Lucy Koh, Apple solicita la prohibición permanente de una veintena de teléfonos inteligentes y de dos modelos de tabletas de Samsung. Se trata de antiguos modelos como los teléfonos Galaxy S y S2 o la tableta Galaxy Tab 10.1, que Samsung dejó de vender en Estados Unidos.
PUBLICIDAD
Sin embargo el grupo estadounidense afirma actuar como medida de precaución “puesto que Samsung pone frecuentemente en el mercado nuevos modelos (…) una prohibición es importante para aportar a Apple la ayuda necesaria para combatir futuras infracciones de Samsung vía productos que no serán supuestamente diferentes de esos que fueron juzgados como infractores” de las patentes, afirmó.
La demanda constituye un nuevo capítulo en un dilatado proceso que data de 2012 en el juzgado de San José (California), en el curso del cual la justicia había estimado que los aparatos de Samsung infringían las patentes de Apple, en cuestiones como el hecho de “pellizcar” la pantalla con los dedos o golpearla suavemente para hacer un zoom, según Apple.
Tras el proceso californiano que fue en parte sometido a juicio de nuevo este año, el jurado estimó que Samsung debía pagar unos 930 millones de dólares de multa, una cantidad de la que la jueza Koh debe confirmar todavía una parte.
Apple por su parte afirma en su recurso que ha sufrido daños “irremediables” y que “las pérdidas incalculables de parte del mercado y de las ventas muestran que las indemnizaciones financieras no son un remedio adecuado”.
Apple ya obtuvo la prohibición de importar a Estados Unidos algunos modelos de teléfonos inteligentes antiguos de Samsung, ante la Comisión de Comercio Internacional estadounidense (USITC).
La jueza Koh había por su parte rechazado en diciembre de 2012 otra demanda de prohibición, pero una Corte de Apelación invalidó esta decisión, de ahí el nuevo recurso de Apple.
El grupo estadounidense solicita que su nueva demanda de prohibición de venta de aparatos de Samsung sea examinada en una audiencia prevista para el 30 de enero.
