Por: Luciana Alva Ramírez
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En setiembre de este año, Alfonso Torres Della Pina (68) fue reconocido con el Premio Adulto Mayor Empresario de AFP Prima, luego de más de 50 años trabajando como joyero: primero junto con su padre y luego encargado de su propia empresa.
Con solo 18 años, Alfonso decidió que era momento de iniciar su propia empresa luego de haber aprendido y trabajado al lado de su padre, el conocido joyero y presidente de la Federación de Artesanos de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), José Torres Salcedo.
El inicio no fue fácil. Armó un taller de orfebrería en el techo de la casa de su abuela y produjo sus primeras piezas con la ayuda de su hermano menor y algunos amigos del barrio.
Poco después, la inscripción de la empresa Dellapina en la SNI fue rechazada debido a que era pequeña y no contaba con un local propio.
Este fue el primer fracaso de Alfonso, que supo aprovecharlo al formar, junto con otros compañeros emprendedores, el Comité de la Pequeña Industria (COPEI) de la SNI, donde ocupó el puesto de secretario.
‘Hay que enseñar a los jóvenes la importancia del fracaso. Fracasar es un éxito’, comenta Alfonso al recordar la formación del COPEI.
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Desde ese momento, Alfonso fue reconocido como empresario. Además se convirtió en consejero de otros emprendedores que buscaban apoyo para hacer crecer sus negocios.
Al mismo tiempo, gracias a los viajes que realizaba al interior del país durante los fines de semana para vender sus productos y expandir su marca, se le presentó la oportunidad de compartir su experiencia con otros empresarios joyeros.
A pesar de ser menor que muchos de ellos, Alfonso consiguió enseñarles técnicas valiosas para el trabajo de joyero que aplica en cada una de sus creaciones.
Gracias a la experiencia acumulada desde que trabajaba en el taller de su padre, Alfonso ha dictado en los últimos años cursos de pequeña empresa, marketing y comercio internacional. Ahora tiene planeado lanzar una web que eduque a los jóvenes emprendedores para que puedan fundar y administrar una pyme.
Han pasado 30 años desde que fundó Torres Della Pina Orfebres y hoy es la cabeza de una exitosa pequeña empresa que produce joyería de plata que se vende en centros comerciales de Lima, Piura, Arequipa, Trujillo, Cusco y Tumbes, y en el duty free del aeropuerto Jorge Chávez. También exporta a Estados Unidos y Europa.
Dellapina está enfocada en satisfacer a sus clientes ofreciendo productos de buena calidad con diseños novedosos. ‘No me interesa tener un producto masivo, yo no pienso en vender miles. No busco la cantidad, sino la rentabilidad’, explica.
De esta manera, Alfonso Torres Della Pina ha conseguido cumplir sus principales metas profesionales y personales, y ser reconocido tanto por sus clientes como por otros empresarios por su excelente trabajo.
