(AFP). La Unión Europea podrá pronto volver a exportar carne vacuna hacia Estados Unidos, un mercado vedado desde 1998 por el desastre en la cadena alimenticia provocado por la enfermedad de las “vacas locas”, indicó este lunes la Comisión Europea.
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Para la Comisión, la reapertura de este mercado será posible por una decisión del Departamento de Agricultura estadounidense “de alinear la legislación estadounidense a las normas internacionales” en materia de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB, o “enfermedad de las vacas locas”).
Esta medida, que entrará en vigor tres meses después de su próxima publicación oficial, “significa que las exportaciones de carne vacuna podrán ser autorizadas nuevamente”, según un comunicado de la Comisión.
Estados Unidos cerró su mercado a la carne vacuna europea como reacción a la enfermedad de las “vacas locas” descubierta en la UE. Impuso medidas que van más allá de las recomendaciones de la Organización Mundial de Sanidad Animal.
La decisión estadounidense “lanza un mensaje claro al nivel mundial de que la carne de la UE es sana”, subrayó la Comisión y pidió a EEUU que “levante las restricciones aún en vigor sobre los productos ovinos y cabrunos europeos”.
Según los científicos, la epidemia de EEB, identificada a fines de los años 1980 en los bovinos británicos, se propagó a través de harinas animales destinadas a la alimentación del ganado y producidas a partir de animales infectados.
Gran Bretaña reconoció en 1996 la existencia de una eventual relación entre la EEB y la aparición de un caso de una nueva forma de enfermedad humana conocida como enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (MCJ), el nombre de dos neurólogos que la describieron casi simultáneamente en 1920 y 1921.
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La enfermedad de Creutzfeld-Jakob, la variante humana de la EEB, puede ser mortal para las personas. Se trata de una degeneración mortal del sistema nervioso central caracterizada por la acumulación de un prión, una proteína anormal que puede transmitir este mal.
La venta de carne bovina figura entre los puntos de discordia de las negociaciones que actualmente mantiene la UE y Estados Unidos en vistas de concluir un amplio acuerdo de libre comercio. Los agricultores estadounidenses se quejan de las normas europeas que restringen el acceso a la carne con hormonas.