Por: Marcos Chumpitaz
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De los diversos métodos anticonceptivos que hay en el mercado, sin duda uno de los que se utiliza de forma más irresponsable e inadecuada es la píldora oral de emergencia, mal llamada ‘píldora del día siguiente’, indica la Sociedad Peruana de Obstetricia y Ginecología (SPOG).
El hecho de que esta pastilla deba ser ingerida dentro de las 12 a 24 horas posteriores a una relación sexual ha hecho que muchas mujeres peruanas lo tomen de forma rutinaria, sin medir las consecuencias.
Algunos datos señalan que algunas jóvenes lo consumen cada 15 o 30 días después de una relación sexual sin protección.
‘Se toma como si fuera un Alka Seltzer, cuando no debe ser así. Puede haber riesgos a la salud si se abusa’, indica el doctor Alfredo Celis, presidente de la SPOG.
Para despejar algunas dudas sobre este método, el experto nos da algunas precisiones del mismo.
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1 ¿Debe llamarse píldora del día siguiente? No. Para el doctor Alfredo Celis, este es un nombre ‘desafortunado e inadecuado’. El especialista señala que la píldora oral de emergencia fue creada para ser usada en situaciones ‘de emergencia’, ante una relación sexual no planificada o una relación forzada por violencia sexual que ocurra durante los días de riesgo. Por lo tanto, debe ser usada esporádicamente o de manera ocasional para prevenir un embarazo no deseado. ‘Lamentablemente, muchas mujeres lo usan después de cualquier relación sexual y no cuando es de riesgo, lo cual está muy lejos del objetivo de la píldora’, agrega el presidente de la SPOG.
2 ¿Su uso rutinario trae riesgos? Sí. El mal uso de este método anticonceptivo puede provocar trastornos menstruales y gastrointestinales. Además, la SPOG indica que cuando se usa con frecuencia, la píldora del día siguiente puede perder su efectividad.
3 ¿Es 100% efi caz contra el embarazo? No. La eficacia en la reducción del riesgo de un embarazo de estas píldoras es según la OMS, del 52 al 94%.
4 ¿Cuál es el público más vulnerable a esta píldora? Las usuarias de mayor riesgo son las adolescentes, quienes cada vez inician su actividad sexual a más temprana edad, con el agravante de no contar con información adecuada. ‘El problema es que los padres no hablan de estos temas con ellas, ya que hacerlo es admitir que sus ‘niñas’ van a tener relaciones. En el colegio tampoco se enseña de forma adecuada y solo se limitan a dar algunas charlas ocasionales sobre el tema’, indica el especialista. Por otro lado, en la mayoría de centros de salud y hospitales, no hay consultorios para la atención de las adolescentes. Estos deberían estar en ambientes adecuados y contar con profesionales idóneos y capacitados donde se pueda orientar, educar e informar acerca de su salud sexual reproductiva, así como de los diferentes métodos anticonceptivos que existen. ‘Sin duda, requieren de una atención diferente al de la población adulta’, señala el doctor Alfredo Celis.
