El pacifista Garry Davis, autoproclamado “primer ciudadano del mundo” después de haber renunciado a su ciudadanía estadounidense, y activista por un gobierno mundial, murió a los 91 años, dijo el lunes a la AFP su movimiento.
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Davis, quien había viajado por el mundo sin papeles oficiales, excepto los que él mismo había creado, y por lo cual había sido expulsado, detenido o preso, murió el miércoles pasado en Williston, Vermont (noreste de Estados Unidos), según la asociación World Service Authority (WAS). Habría cumplido 92 años el sábado.
“Yo no soy un hombre sin patria, soy un hombre sin nacionalidad”, declaró en una entrevista con Newsweek en 1978, según informa el New York Times.
Este exactor y bailarín, hijo de músicos ricos, había descubierto los horrores de la guerra cuando era piloto de bombardero durante la Segunda Guerra Mundial (1939-45).
Convencido de que las fronteras creaban guerras, en 1948 se presentó en la embajada de Estados Unidos en París y renunció a su ciudadanía estadounidense, convirtiéndose en “ciudadano del mundo”, indica su página web Garrydavis.org.
Amenazado de expulsión, pidió “asilo político” al “territorio” de las Naciones Unidas del Palais de Chaillot, la primera sede de la ONU creada en 1946.
Luego instauró la primera “tarjeta de identificación de los Ciudadanos del Mundo”, y durante una manifestación frente a la Asamblea General de la ONU exigió el establecimiento de una Constitución y un gobierno mundial.
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Su iniciativa recibió el apoyo de intelectuales, como los escritores Albert Camus, André Gide y Jean-Paul Sartre, el físico Albert Einstein o el abate Pierre.
En 1953, Garry Davis fundó en Estados Unidos, adonde entró como “inmigrante”, un gobierno mundial de Ciudadanos del Mundo, que emite pasaportes, certificados de matrimonio, entre otros documentos. Según la WSA, 950.000 personas tienen el pasaporte aceptado al menos en una ocasión en 160 países.
Davis se había instalado en el este de Francia en 1961 para fundar una empresa embotelladora de agua, sin dejar su militancia, antes de regresar a Estados Unidos en 1977 “como extranjero expulsable”.
El pacifista le había enviado un pasaporte el año pasado a Julian Assange, fundador de WikiLeaks, refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde hace más de un año, y otro la semana pasada al exconsultor de la CIA Edward Snowden, atrapado en un aeropuerto de Moscú tras revelar un programa de espionaje del gobierno de Estados Unidos.
Garry Davis se presentó en 1988 a la presidencia de Estados Unidos en nombre del Partido de los Ciudadanos del Mundo y escribió cinco libros.
