Alrededor de 8 mil niños, niñas y adolescentes del Perú sufrieron maltrato psicológico y otros 4 mil maltrato físico durante el 2012, según reportes de los Módulos de Atención al Maltrato Infantil y del Adolescente en Salud (Mamis) instalados en hospitales públicos.
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Las verbalizaciones agresivas y calificaciones despectivas, como ‘eres un incapaz’ ‘no eres bueno para estudiar’ ‘por qué no eres como tu amigo’, que expresan los padres a sus hijos, constituyen lo más frecuente en cuanto a maltrafo psicológico se refiere, según la información proporcionada a Andina.
Pero también son habituales los golpes en el cuerpo, y el uso de chicotes, látigo o palo, lo que muchas veces lleva a los menores a atenderse con un médico o, peor aún internarse en los hospitales, dijo Luis Bromley Coloma, director ejecutivo de Salud Mental del Ministerio de Salud.
El experto advirtió a los padres de familia o tutores que tanto el maltrato físico como psicológico dejan secuelas que marcan toda la vida, pues ocurren durante el proceso de construcción de la personalidad, es decir, durante la niñez y adolescencia.
Bromley Coloma comentó si bien las cifras pueden ser mayores, dado que hay muchos casos que no se reportan, lo que revelan las estadísticas de Mamis es que aún se conservan patrones inadecuados de conducta para disciplinar a los niños y que violentan sus derechos humanos.
‘Estos niños se convertirán en personas inseguras, con dificultad para tomar decisiones pues esperan el visto bueno de los demás. Son los que esperan la aprobación de los otros porque sus padres los desaprobaron permanentemente’, explica el especialista.
Sin embargo, a pesar de la estadística, el funcionario considera que por lo menos esos niños, niñas y adolescentes ya no están invisibilizados. Gracias a las historias clínicas que elabora Mamis ya se sabe quiénes son, tienen nombre propio y un domicilio donde se les encuentra.
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Bromley Coloma no pudo explicar el perfil de las víctimas, pues aún el módulo Mamis no ha sistematizado el registro que tiene de los casos. En cambio si se refirió al estudio que realizó el Instituto Nacional de Niño sobre la atención de violencia física y psicológica entre 2,006-2,011 en sus instalaciones.
En esa investigación, se reveló que el 63.9% de las víctimas fueron niñas y que 39.9% adolescentes. Asimismo, 60.6% de los agresores fueron varones y el 65% de los maltratos ocurrieron dentro de la casa.
De igual modo, se estableció que el 48.6% de los casos reportadon fueron por violencia sexual y que el 73% de las víctimas en este caso fueron niñas y 44% adolescentes.
Los Mamis son servicios de atención diferenciada para los casos de niños, niñas y adolescentes victimas de maltrato. La prestación es integral tanto para la víctima como para su familia y multidisciplinaria porque la visión es de apoyo a la salud mental y social.
También cuenta con un equipo de profesionales que trabaja coordinadamente acciones de protección al menor y se entrena y capacita de forma permanente.
Actualmente, por ejemplo, aplican una codificación especial en las historias clínicas de cada caso para determinar quién es la fuente de agresión: madre o padre de familia, amigo o conocido (bulling) u otra persona especificada como vecino o profesor.
‘Estos es para evitar que los casos de maltrato queden como casos de fracturas, hematomas o quemaduras que se resuelven como simples problemas de salud’, precisó Bromley.
En el país existen 49 Mamis que funcionan en algunos hospitales y centros de salud de alta complejidad. Quince se ubican en Lima y Callao y 34 en Ica, Cusco, Ayacucho, Apurímac, Madre de Dios, Pasco, La Libertad, Lambayeque, Tumbes, Cajamarca, Arequipa, Ucayali, Loreto y Huancavelica.
