Un proyecto de ley del estado de California, en pro de garantizar la salud de los actores porno, obligaría a que, durante el rodaje, usen preservativos u otra forma de protección.
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De acuerdo a diversos estudios, los actores de esta clase de películas padecen un índice mucho más elevado de enfermedades de transmisión sexual que las prostitutas legales en Nevada.
La industria pornográfica de dicho estado se ha pronunciado en contra de la posible ley. Incluso han amenazado con abandonar California si se aprueba. Según dicen, dan trabajo a 10.000 personas en el estado de California y aporta más de 1.000 millones de dólares a la economía local.
