Más allá de los matices, el Perú puede considerarse un país feliz. Las relaciones con la familia y los amigos, el clima y hasta la diversa gastronomía contribuyen al optimismo y la sensación de bienestar.
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A estas conclusiones llegaron recientemente el psicólogo social Jorge Yamamoto y su equipo de investigación, tras analizar más de mil encuestas a nivel nacional para elaborar un mapa de las zonas más felices del país.
El mapa, que es la continuación de una línea de investigación sobre la felicidad iniciada el 2003 en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), revela que las zonas norte y central del país son las más felices. Y los menos felices, los peruanos que viven en el sur.
‘Para un peruano, sin embargo, ser feliz no está en función del lugar donde vive’, explica a Publimetro Yamamoto. ‘Hay que considerar la combinación de este con otros factores como las necesidades que tiene, sus logros, los recursos de los que dispone y sus valores’.
Ser positivo, disfrutar de lo que uno tiene y adaptarse a los problemas son los elementos claves para la felicidad del peruano, determina el estudio.
Con todo, Yamamoto alerta que el crecimiento económico puede convertirse, sí, en un factor de infelicidad. ‘No vayamos a terminar como otros países ricos, pero con grandes conflictos sociales e infelices’, concluye el especialista.
Alegría popular Algunos de los aspectos que hacen felices a los peruanos según el lugar donde viven. * En las pequeñas comunidades andinas y amazónicas, pasar tiempo con la familia y participar activamente en las fiestas patronales son factores fundamentales. * En Lima, los factores de felicidad se ‘urbanizan’. Así, ponerse contento puede estar relacionado con el hecho de salir a bailar a una discoteca o participar en alguna fiesta privada.