Los amigos cercanos del príncipe Harry defendieron al joven miembro de la realeza británica tras el escándalo en Las Vegas (EE.UU.), argumentando que las fotos filtradas, donde se le ve desnudo fueron producto de un abuso de confianza. Sin embargo, algunos de esos amigos son justamente los que han causado más de un dolor de cabeza a la realeza por años.
PUBLICIDAD
Harry tiene un círculo social muy pequeño, conformado sobre todo por amigos del colegio y familiares. Los miembros de ese círculo disfrutan de riqueza y les gusta gastarla en vidas llenas de estilo. Dos de sus amigos más cercanos (el banquero Tom ‘Skippy’ Inskip y el modelo Arthur Landon) lo acompañaron a Las Vegas, pero este no fue el primer escándalo en que han estado envueltos.
Una semana antes del viaje a Las Vegas, Landon habría publicado fotos en Facebook que mostraban a Harry desmayado en la playa en la isla privada de Necker de Sir Richard Branson (creador de las empresas Virgin), además de fotos en la que aparece con una máscara de gas y una pipa para fumar marihuana. Inskip se volvió famoso el año pasado cuando bailó junto con Harry antes de su salto con la ropa puesta en la piscina de un hotel croata.
Una cultura de exceso se ha desarrollado en esta superélite de jóvenes. Otro amigo de infancia del Príncipe, Guy Pelly, administraba el club Public al oeste de Londres, el favorito de Harry y su hermano William. El establecimiento era blanco de quejas de los vecinos, quienes señalaban que allí había violencia y ‘suciedad’. El lugar fue clausurado.
El biógrafo del Príncipe, Robert Jobson, dijo a Publimetro que el grupo de Harry disfruta de ‘un estilo de vida bastante alocado. Siempre salen para divertirse y no se preocupan por el dinero’. Al Príncipe le gusta hacer amigos. ‘Es muy amigable y conversador. Además, hay un enjambre de mujeres atractivas detrás de él’.
Jobson cree que el Príncipe se ‘deja llevar’, lo cual podría dañar su prometedora carrera de piloto y de embajador real. Ahora la monarquía limitará sus apariciones públicas, y esperará a ver si Harry puede dejar atrás la etiqueta de ‘Príncipe Playboy’.
