Por Ximena Arrieta
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Tras el hallazgo en marzo de una sacerdotisa de la cultura Lambayeque dentro del proyecto arqueológico Chotuna Chornancap a 12 kilómetros de Chiclayo, otro descubrimiento asombra a los arqueólogos.
Se trata de una tumba, hallada a 60 centímetros de la cámara de la sacerdotisa, que pertenecería a un personaje de élite de la cultura Lambayeque. En el ajuar funerario se encontraron orejeras de oro, conchas de spondylus y joyas de plata y cobre.
Lo particular es que la tumba estuvo inundada por ocho siglos en las aguas subterráneas del lugar. ‘Este descubrimiento es trascendental porque ahora tenemos personajes de gran magnitud en este territorio, lo que nos permite entender de manera diferente la sociedad Lambayeque’, dice Carlos Wester, arqueólogo encargado del proyecto.
Si bien aún se sigue estudiando dicho hallazgo, Wester señala que no es frecuente encontrar dos tumbas puestas una sobre otra y mucho menos, una sumergida en agua. Wester no descarta que haya una relación entre este personaje y la sacerdotisa. ‘La relación puede darse en diversos niveles como el político, económico, familiar, etc’, explica.
Uno de los retos más importantes del hallazgo será la conservación. ‘La tumba estuvo sumergida por mucho tiempo y al exponerse violentamente a un cambio de temperatura, el nivel de afectación aumenta’, comenta el arqueólogo.
