Desde la capital de Belfast, Irlanda del Norte, se ha creado una campaña mundial para salvar a un perro llamado Lennox, que ha recibido una sentencia de muerte por parecerse a un pitbull (raza prohibida como mascota en Gran Bretaña).
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La dueña del perrito informó que el municipio de Belfast insistía en sacrificarlo, y hasta se había negado a entregar sus cenizas a la familia. ‘Por favor, no maten a Lennox’, escribió @Inesian junto a otros cientos de tuiteros.
A pesar de los esfuerzos, las autoridades informaron esta mañana que el animal no sigue más con vida. “El Ayuntamiento de Belfast confirmó hoy que el perro Lennox, un pitbull tipo terrier ilegal se ha puesto humanamente a dormir”, dijo un portavoz de Belfast.
