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“La Cámara de Diputados tiene en sus manos la decisión. Ya es tiempo de que la democracia uruguaya salde su deuda con las mujeres de todas las edades y condiciones”, rezó la proclama difundida por la “Coordinadora por el aborto legal”, responsable de la convocatoria.
En la última sesión del año pasado el senado aprobó el proyecto, pero la izquierda gobernante necesita de los votos de todos sus diputados para darle sanción definitiva en la cámara baja, sin embargo uno de sus representantes adelantó que votará en contra.
“Muchas mujeres hoy mueren porque está penalizado y lo importante es que cada consciencia y que cada persona pueda decidir lo que quiere hacer con su cuerpo”, dijo Matilde López, estudiante de 21 años.
Los manifestantes que portaban manos de cartón de color naranja, símbolo de la lucha, crearon un ambiente festivo, con música y enormes lazos que rodeaban la plaza.
La aprobación del proyecto dejaría sin efecto la norma vigente desde 1938 que pena con tres a nueve meses de prisión a la embarazada que consienta un aborto, con seis a 24 meses a quien colabore con el mismo y dos a ocho años para quien lo practique sin el permiso de la mujer.
En abril se dio a conocer que dos mujeres murieron en 2012 tras practicarse abortos en condiciones inadecuadas, hecho que revivió la polémica.
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“Estas muertes se podrían haber evitado si el sistema político hubiera sido capaz de dimensionar el costo que tiene para las mujeres la constante postergación de la aprobación de esta ley”, agregó la proclama.
Según datos de organizaciones no gubernamentales en Uruguay, de unos 3,25 millones de habitantes, se registran más de 30.000 abortos por año, contra unos 47.000 nacimientos anuales.
En 2008 el presidente del país en ese momento, el socialista Tabaré Vázquez, vetó parcialmente una ley que despenalizaba el aborto alegando “principios éticos”, pero el actual mandatario José Mujica ya advirtió que no vetará la ley en el caso de que el Parlamento la apruebe.
