Esto escapa a cualquier parámetro de la comprensión humana. Tres personas en Brasil fueron detenidas pues todo indica que son culpables de matar y comer los restos de varias mujeres a las que consideraban “impuras”.
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Jorge Beltrao Negromonte, uno de los detenidos, registrara un libro de su autoría titulado “Revelaciones de un esquizofrénico”, en el que revelaba detalles de las actividades de la supuesta secta.
El hombre de 51 años contaba con pelos y señales cómo sacrificaban a las víctimas. “Al mirar el cuerpo ya sin vida de la adolescente mala, siento un alivio. Agarro una lámina y comienzo a retirar toda su piel y después la divido. Nos alimentamos de la carne del mal como si fuese un ritual de purificación. El resto lo enterramos en el patio”.
La esposa de Jorge Beltrao confesó a la policía que vendía empanadas de carne humana en la ciudad de Garanhuns y era proveedora de bares y restaurantes, según informó el comisario Wesley Fernandes.