Aprendiendo a leer y escribir con los sonidos

Por Fiorella Sirani OchoaEspecialista en Dificultades de AprendizajeCentro Peruano de Audición, Lenguaje y Aprendizaje – CPAL

La complejidad del proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura ha conducido a muchos investigadores a llevar a cabo diversos estudios con la finalidad de encontrar los factores que predicen este aprendizaje, de manera que su estimulación facilite su abordaje; uno de estos predictores es la ‘conciencia fonológica’. Esta habilidad permite que los niños focalicen su atención en los sonidos individuales de las palabras.

Los niños desde muy pequeños están expuestos a aprender su lengua pero no son conscientes de las unidades que componen las palabras. Los padres, cuidadores y docentes los vamos estimulando auditivamente desde el momento que les cantamos canciones con diferentes ritmos y melodías. Al ingresar al colegio esta estimulación se vuelve formal trabajándose específicamente esta conexión entre los fonemas del lenguaje oral y las letras impresas.

Por ello, la conciencia fonológica es considerada no solamente una habilidad previa y fundamental para el desarrollo de la lectura, sino que ejerce una relación de causa y a la vez de efecto, debido a que todo lector hábil debe llegar a realizar operaciones mentales sobre la estructura fonológica de la palabra, es decir, lograr un conocimiento consciente de que las palabras están compuestas por letras y que cada una tiene un sonido.

Consideramos necesario que las habilidades fonológicas deben ser enseñadas desde la etapa preescolar favoreciendo la conciencia de la palabra, la sílaba y los fonemas como unidades fonológicas que componen la estructura del lenguaje oral. Los niños deben llegar a manipular el lenguaje a través de actividades de componer y descomponer la palabra en sílabas y sonidos aislados. Su enseñanza ha de ser divertida para niños y maestros. Cuando aprenden sobre los sonidos, están haciendo descubrimientos sobre su lengua y los niños participan, generalmente, con mucho interés.

Es así que a través de diferentes actividades como: jugar a rimar puedo decir ‘me llamo Catalina y me baño en la tina’, o decir ‘un grillo muy pillo se robó un anillo’, podemos ayudar al niño a que sea consiente de los sonidos. Otros juegos que podemos realizar es ‘el veo veo’ , jugar a nombrar palabras encadenadas (ejemplo silla, llave, vela, etc); también podemos buscar palabras dentro de otras; por ejemplo en ‘matamosca’ se puede encontrar ‘mata’ y ‘mosca’, en ‘entretenimiento’ se puede encontrar ‘en’, ‘entre’, ‘ten’ y ‘miente’.

En conclusión, al desarrollar y mejorar la conciencia fonológica se facilita la adquisición exitosa de la lectura y escritura lo cual impactará de forma positiva en el desempeño escolar.

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