Si, muchas veces quisiéramos regresar el tiempo a cuando éramos pequeños y podíamos dormir la siesta sin remordimiento. Pero bueno, el ser adulto tiene muchas ventajas, así que al leer lo siguiente puede que ya no extrañes esto.
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Según Rebecca Robbins, PhD, investigadora de la Facultad de Medicina de NYU y coautora de ‘Sleep for Success!’ dice: “Si duermes de siete a ocho horas por la noche, las siestas pueden ser parte de un horario saludable de sueño”, y claro que nadie discute esto, pues queremos dormir la siesta.
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Justo este tema se hizo relevante en la década de los 90, cuando el periodista Bhim Suwastoyo que trabajaba en una agencia llamada Agence France Presse (AFP) en Yakarta, Indonesia, se hizo famoso en su trabajo por dormir a ratos, detrás de su escritorio.
“Cada vez que alguien de la oficina central de Hong Kong me visitaba, lo primero que pedían era: ‘Muéstrame tu cama’”, dijo Suwastoyo cuando fue entrevistado en e programa de Business Daily.
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Según el Suwastoyo, dormir la siesta en la oficina le fue de mucha ayuda en el momento de la crisis monetaria asiática de 1997. Él comentó que trabajaba a todas horas cubriendo noticias de último momento, así que tomaba siestas cada vez que tenía un momento tranquilo.
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Se dio cuenta de que incluso en días tranquilos una siesta de media hora le ayudaba bastante. “Te da más energía para el resto del día, es como comenzar como nuevo por la mañana”, dijo al medio.
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En algunos países del sur de Europa, la siesta de la tarde es una institución para los que se lo pueden permitir y una situación similar ocurre en China. En Japón, dormitar en reuniones es al parecer una señal de estatus para mostrar lo mucho que una persona trabaja.
Ya que está demostrado que la energía puede ser mejor al momento de dormir una siesta saludable de 20 minutos. Además de que mejora la actitud y rendimiento de las personas. Si llegaras a dormir más tiempo, tu cuerpo entra a un sueño más profundo del que es más difícil despertarse, según la Dra. Dautovich.
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Ahora viene lo más difícil, ¿cómo hacerlo en la oficina? Puedes pedirle permiso a tu jefe. Duerme después del almuerzo, generalmente entre las 2 y 4 de la tarde. Limita tu siesta a menos de 20 minutos y usa los otros 10 minutos para recuperarte.
Fuente Askmen Latam
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