PUBLICIDAD
VANNA PEDRAGLIOCOACH DEPORTIVA Y NUTRICIONAL
¿Entrenas mucho pero no consigues lo que buscas? ¿No desarrollas tu musculatura ni la tonificas como quieres? Muchas veces la voluntad y el esfuerzo en el entrenamiento no son suficientes, simplemente porque hay muchas otras cosas a tomar en cuenta. Quizá por desconocimiento estás cometiendo errores de principiante. Entonces, ¿qué es lo que no estamos haciendo bien? Aquí comento algunos errores típicos que cometemos.
1.- Realizar ejercicios analíticos y no complejos de varios grupos musculares. Los ejercicios analíticos involucran normalmente uno o pocos músculos a la vez, a diferencia de los complejos multiarticulares. Estos últimos nos benefician más porque al reclutar mayor cantidad de grupos musculares en un mismo movimiento se aumenta el gasto energético en el organismo y la secreción de hormonas claves para el desarrollo, la regeneración y el mantenimiento muscular: la hormona de crecimiento y la testosterona. Por ejemplo, no lograremos el mismo beneficio haciendo un curl de bíceps o ejercicio analítico que ejecutando una dominada o barra, que recluta muchos más grupos musculares.
2.- No entrenar con la frecuencia e intensidad adecuada. La cantidad de días de trabajo, así como el descanso debido, son igual o más importantes que la misma sesión de entrenamiento. Debemos considerar que si la frecuencia es demasiado alta o acumulamos muchas sesiones de entrenamiento en un periodo corto de tiempo podemos aumentar la probabilidad de contraer una lesión. Por el contrario, entrenar con poca frecuencia puede que no logremos la adaptación al estímulo que necesitamos para lograr el desarrollo muscular que buscamos. Por lo tanto, lo que deberíamos hacer es tratar de encontrar una frecuencia óptima de entrenamiento que se adapte a nuestra propia capacidad de recuperación. Para muchos, 3 a 5 sesiones semanales son suficientes, pero para otros deberán ser 8 o 9 con doble carga al día alternando capacidades físicas. Cada uno es distinto y debe lograr adaptarse en el tiempo progresivamente. Por otro lado, realizar siempre la misma rutina con la misma intensidad -ya sea en peso, repeticiones, kilómetros corridos o tiempo- no seguirá estimulando al cuerpo a seguir compensando para seguir promoviendo el desarrollo de fuerza o musculatura.
3.- No prestar la atención necesaria a una correcta alimentación. El error más común es creer que el ejercicio intenso es suficiente y compensa una alimentación queno sea saludable ni equilibrada. Es más, si entrenamos de manera adecuada pero tu alimentación no está a la par, es muy poco probable que consigas aumentar tu cantidad de músculo. De hecho, lo que posiblemente ocurra es que seas más propenso a sufrir problemas comunes de sobreentrenamiento por no tener los nutrientes necesarios para que tu organismo se recupere con éxito. Por eso te aconsejo que leas sobre alimentación adecuada antes y después de entrenar en función al tipo de ejercicios que estés realizando y según cómo te guste alimentarte. Recuerda que todos somos distintos y ni un biotipo es idéntico a otro, así que tomará un tiempo darte cuenta qué funciona para ti, tal como ocurre con el entrenamiento.
4.- No darle el tiempo suficiente al calentamiento. No calentar de forma adecuada puede impedir que saquemos el máximo provecho a las sesiones principales de entrenamiento. No seremos capaces de levantar el peso óptimo, correr a la velocidad que debemos lograr o realizar los ejercicios a la potencia máxima, ya que no tendremos la musculatura en las condiciones óptimas requeridas de temperatura y oxigenación, además de un sistema nervioso preparado.
PUBLICIDAD
En general, si estás buscando aumentar tu masa muscular magra, sé consciente que son muchos los factores de suma importancia a considerar. Recuerda que debes también hidratarte de manera correcta y dormir al menos 7 horas diarias. Ya sabes, ahora a entrenar en serio ¡con conocimiento y conciencia!
-.
Gracias a todos los que colaboraron con la Reciclatón.