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Pareja: 5 secretos para una relación de pareja exitosa

Claridad ante todo: nuestra pareja no tiene por qué adivinar lo que queremos de él y de la relación. Y nosotras tampoco tenemos por qué adivinar cuáles son sus expectativas. ¿Están listos para enseriarse? Entonces hablen acerca de qué esperan el uno del otro: ¿hijos?, ¿tiempo libre para estar solos?, etc. Y no basta con una conversación inicial, la comunicación debe mantenerse, y no basta con preguntar cómo estuvo el día, sino hablar de cómo están como pareja y chequear si sus expectativas se están cumpliendo o si han cambiado.

No olviden que además de pareja son individuos: no deben dejar que la pareja se coma a las personas que la forman. Cada uno de ustedes es un individuo con intereses propios, con planes propios, que deben ver cómo pueden coincidir con sus proyectos de pareja. En esto deben recordar ser equitativos, es decir, no basta con que uno solo de ustedes mantenga su individualidad, los dos deben hacerlo. Esto puede implicar desde tiempo para que cada uno desarrolle sus pasatiempos, a la oportunidad de seguir estudiando, de comenzar un emprendimiento, etc.

No den las cosas por sentado: ¿cuando estaban saliendo él solía comprarte flores y abrirte la puerta del auto? ¿Y tú le escondías mensajes de amor en la chaqueta que se iba a poner al día siguiente? Ese tipo de acciones mantienen el amor vivo, pero es usual que al vivir juntos o casarse, se dé la relación por sentado y se dejen atrás estas atenciones. Eso es un error que repercutirá negativamente en sus relaciones, y que pueden subsanar fácilmente manteniendo la preocupación por el otro.

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Crecer como pareja: el paso del tiempo nos cambia, aparecen nuevos intereses, se superan obstáculos, se logran proyectos, etc. Todo esto repercute en nosotros como individuos y debemos aprender a reconocer esto, en vez de quedarnos pegados en los que éramos cuando recién comenzamos a cortejarnos, ya que las circunstancias de la vida y de la relación han cambiado. Aprendan a aceptar esto y ver cómo adaptarse, en vez de rechazar todo cambio. Por eso es importante trabajar en una relación, en vez de dejarla estar; y mantenerse siempre en comunicación con el otro.

Los conflictos no se evaden, se solucionan: sería muy ingenuo pensar que nunca tendrán algún conflicto en su relación. Hay muchas razones que pueden ser tensionantes en una pareja: la decisión de tener hijos (cuándo, cuántos, cómo criarlos), el factor económico, la compra de la primera casa, etc. lo mejor que pueden hacer es no esconder los conflictos bajo la alfombra, así se acumularán y terminarán estallando en forma descontrolada. Por eso deben saber comunicarse y negociar, es decir, aprender que hay cosas en las que deberán ceder y otras en las que no; buscando lo mejor para los dos, en vez de imponer siempre el criterio de uno.

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Gracias a todos los que colaboraron con la Reciclatón.

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