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La pregunta ‘¿cuáles son tus defectos?’ es parte del manual del reclutador de Recursos Humanos, y seguramente a todos nos ha tocado responder –o al menos intentarlo- en más de una entrevista laboral. Pero, ¿te has preguntado alguna vez si existe una respuesta correcta que te ponga un paso adelante de otros postulantes?
¡La falsa modestia no funciona!
Si sueles contestar ‘puedo ser demasiado perfeccionista’ o ‘suelo asumir demasiada responsabilidad y no delegar’ es probable que estés dando un paso en falso. Luciano Barredo, Gerente de Marketing de Bumeran.com.pe, el portal de empleos líder en nuestro país, explica que los reclutadores no quieren escuchar este tipo de respuestas.
‘Es común que los postulantes intenten convertir una debilidad en una oportunidad usando la falsa modestia y den estas respuestas, pero no caen en cuenta que son respuestas repetitivas y que no aporta nada de valor para el reclutador, sobre todo si lo que queremos es lograr diferenciarnos de los otros postulantes’, explica.
No es malo tener debilidades o defectos
¿Entonces cómo responder a la bendita pregunta? Kamt asegura que lo que buscan los reclutadores es saber si el entrevistado es consciente de sus limitaciones, es humilde al revelarlas y está trabajando para mejorar. Recordemos que todos tenemos debilidades y defectos, y ello no es malo, lo malo es intentar ocultarlo y no esforzarnos por ser mejores personas y profesionales.
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‘Cuando un reclutador se da cuenta de que el entrevistado miente o responde generalidades piensa que de igual forma no será transparente con su trabajo y va a ocultar errores cuando los cometa. Por el contrario, hablar de tus debilidades y cómo trabajas por mejorar indica flexibilidad y capacidad de adaptación, además de honestidad’, concluye el especialista de Bumeran.com.pe.
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¡A la cañita dile no!
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