Por Asya Gelman – Metro World News
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Ocurre cada cuatro años. El día bisiesto se puede llamar realmente especial, ya que solo ocurre de vez en cuando. ¿Pero por qué es así? La Tierra tarda realmente 365 días, cinco horas y 48 minutos en dar la vuelta alrededor del Sol.
Para equilibrar esto con el calendario, cada cuatro años el año pasa a tener de los usuales 365 días a contar con 366.
Ese día adicional se inserta al final del mes de febrero, que en los años bisiestos pasa a tener 29 días, tal como sucederá mañana sábado.
Si no se hiciera así, cada doce años, un año tendría tres días de más. Además, las estaciones serían un desastre en apenas un par de siglos.
Tan especial es el año bisiesto, que existe un término llamado ‘error de año bisiesto’. Ocurre cuando el 29 de febrero no es manejado correctamente por los dispositivos. Por ejemplo, el 2016 eso paralizó el software de equipaje en el Aeropuerto Internacional de Düsseldorf en Alemania e hizo que varias maletas se quedaran atascadas, mientras los pasajeros que llegaban luchaban por encontrar su equipaje.
La magia del año
Hay algo mágico en este año bisiesto 2020. Según los expertos, es una combinación muy poderosa.
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‘Es el día de la apertura de los portales de energía. Es un día muy especial para hacer manifestaciones, trabajos creativos, cualquier tipo de nuevo aprendizaje o comenzar un nuevo proyecto’, explica Sheelaa M Bajaj, renombrada numeróloga con sede en la India..
Bajaj dice que este día será extremadamente importante para aquellos que están confundidos y buscan orientación y para las personas que hacen prácticas espirituales.
‘Los nacidos el 29 de febrero son extremadamente afortunados porque la energía del día es muy poderosa. Por supuesto, no pueden celebrar cumpleaños todos los años. Pero se benefician mucho de las energías del universo’.
Sheelaa también afirma que el 2020 se considera ‘un año de premio gordo’. Así, explica que es importante no solo para los negocios y la carrera, sino también para las relaciones, las mudanzas o los traslados:
‘También es un año en el que las cosas negativas de tu vida se desprenden, así que es un buen momento para desprenderse de cualquier energía negativa. Así que, básicamente, este día y año bisiesto es un punto de inflexión muy auspicioso. Es un momento clave para que todos siembren semillas importantes porque estas semillas se volverán realmente poderosas en los años y décadas venideras’, concluye.
¿Y a nivel personal?
El 29 de febrero, según las tradiciones británicas, las mujeres pueden proponer matrimonio a un hombre.
Según la leyenda, este ritual fue introducido por San Patricio como el único día de este tipo.
Una tradición similar también existe en Irlanda y Dinamarca. Lleva como nombre el Día del Soltero. Si un hombre se niega a casarse, debe comprar doce pares de guantes para la mujer que se lo propuso, a fin de ‘ocultar su vergüenza’ por no tener un anillo de boda. Hoy en día esta tradición es muy criticada por las feministas, ya que las mujeres tienen el derecho de pedir matrimonio cuando quieran.
Los griegos, en cambio, creen que el día bisiesto y todo el año bisiesto es desafortunado para el matrimonio. Una de cada cinco parejas evita celebrar sus bodas este día.
El factor corporativo
Algunas personas ven el día bisiesto como una ‘conspiración capitalista’, creyendo que las grandes corporaciones acordaron no contar este día para ganar más dinero.
Eso es cierto, pero solo hasta cierto punto. Los expertos están de acuerdo en que aquellos que trabajan y cobran al final de cada jornada, obtendrán su dinero por este día extra.
Sin embargo, con aquellas personas que cobran un salario mensual y anual, la cosa no es tan especial. Ellos reciben una cantidad fija de dinero, no importa si el año es común o no. Eso hace que algunos pidan que el 29 de febrero sea mejor un día festivo.
Juliano y gregoriano
• Desde el tiempo de Julio César se viene aplicando la regla de crear un día adicional cada cuatro años. Sin embargo, al no seguir la regla del siglo divisible por 400 (que se sigue hoy), el calendario juliano originó un desfase de 10 días que se fue acumulando en más de 1.200 años.
• A fines del siglo XVI, el Papa Gregorio XII encargó que se haga una nueva regla para determinar mejor los años bisiestos. Este calendario gregoriano es el que sigue vigente. Así, son años bisiestos los años divisibles por 4 excepto los que son divisibles por 100 (salvo que sean divisibles por 400). Según esto, fueron bisiestos los años 1600 y 2000, pero no el 1700 ni el 1800 o el 1900.
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