Ring ring. El teléfono celular se ha convertido en una imprescindible en la jornada diaria. Salir de casa sin llevarlo encima es casi un motivo de fobia o trastorno que confirma cuán dependientes somos de revisarlo cada tiempo seguido.
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Sin embargo, pocos se preocupan de su adecuada limpieza. Pese a que diversos estudios han demostrando la cantidad de bacterias contenidas en su pantalla y teclado, se ignoran las recomendaciones exponiéndose a diversas patologías.
En el Instagram @guilherme_moscat_oficial se destaca que los teléfonos celulares contienen incluso más bacterias y microorganismos que la tapa del inodoro de un baño público. “Hay personas que comen con la mano y tocan el celular”.
Una investigación realizada en 2012 por Farmacología y Terapeútica Venezolana arrojó lo siguiente: 6 de cada 10 encuestados no higienizaba su celular. Además se detectaron bacterias como Staphylococcus sp, Staphylococcus aureus, Klebsiella sp., Enterococcus sp. 0.6%, Enterococcus faecalis, Salmonella y Escherichia coli.
¿Cómo limpiar el teléfono celular?
Higienizar el teléfono celular reduce significativamente la exposición a bacterias causante de enfermedades, insisten los expertos.
Es importante utilizar con una toalla de microfibra para evitar las ralladuras en la pantalla, apenas humedecida en agua. Evita lavar o sumergir el aparato.
En este paso de la limpieza es importante apagar la pantalla del aparato, tampoco tenerlo conectado cargando o usando, por ejemplo, cuando se escucha música. Es importante asear todas las partes del dispositivo, no solo pantalla, sino incluir teclado y el lado posterior, evitando así la propagación de bacterias y microorganismos.
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Para desinfectar se recomienda alcohol isopropílico al 70% que según explicaron, evita la oxigenación. Nunca usar sustancias fuertes como cloro, lejía o químicos.
Esta rutina se debe realizar al menos dos veces al día. También luego de ir al baño, incluso tras pasar las manos por el rostro o la boca.
