El británico Howard Newman se hizo famoso por un gracioso error tecnológico: grabó sus vacaciones utilizando una cámara GoPro. El problema es que durante el itinerario cogía el dispositivo al revés, grabando así su rostro durante el camino.
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Newman iba a viajar a Ámsterdam junto a su esposa y le pidió a su hijo, Mark, que le prestara su cámara. La pareja llegó a Holanda como lo planeado y se la pasaron genial hasta que regresaron a casa.
Ocurre que Newman había tenido la cámara frontal activada y no grabó absolutamente ningún paisaje, sólo su cara feliz de viajero satisfecho y encantado.
El resultado es un primer plano de su rostro paseando por Europa a modo de selfie. Fue Mark quien colgó el video debido a su singularidad. Seguro que te sacará más de una sonrisa.
