1.Bartolomeo Cristofori aprendió a construir violines con el también italiano Nicolò Amati, quien fue miembro de la escuela de cremona y formador de los ‘luthiers’ (personas que reparan instrumentos) más importantes de la época en Italia.
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2.En 1698, este inventor italiano empezó a trabajar en un nuevo instrumento que logre reproducir sonidos tanto suaves, como fuertes, al mismo tiempo. Según lo explicado por Google, este proceso le habría demorado unos 16 años en concretarse.
3.La realización de este prodigioso invento, que hasta el día de hoy, es un influyente instrumento en el mundo de la música, habría sido encargada bajo las órdenes del príncipe Fernando de Médici, para quien Cristofori trabajaba en ese entonces.
4.Cristofori bautizó a su invención como arpicémbalo, porque su significado hace referencia a las palabras ‘arpa-clavicordio’, y sería la nomenclatura más exacta para el instrumento. Pese a lo anterior, su nombre fue popularizado como piano.
5.Su primer arpicémbalo, predecesor de unos veinte modelos realizados en vida, tuvo dos juegos de cuerdas y una caja de resonancia. Esta última, cumplía con la premisa de poder reproducir sonidos de notas suaves y fuertes, o en italiano, ‘piano e forte’.
6.Tres de sus más apreciados arpincémbalos, que datan de la década de 1720, pueden ser hoy apreciados en distintos lugares del mundo. Estos se encuentran en el Museo Metropolitano de Nueva York, en Roma y en Leipzig, respectivamente.
7.Este 4 de mayo, al ingresar al buscador de Google, se puedes apreciar una imagen de Bartolomeo Cristofori sentado sobre un piano. Al darle ‘play’, este empieza a tocar una sencilla melodía, cuya intensidad puede ser programada por el propio usuario.
