La solidaridad sobrevive en las calles. Los pocos ejemplos de esto se viralizan en las redes sociales y se convierte en ejemplo para la sociedad, como la reciente experiencia de una persona en situación de calle que vio retribuida su buena acción.
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Descalzo, sin camisa y bajo el inclemente sol, el indigente se apostó al lado de un auto lujoso estacionado. Por largo rato comenzó a admirarlo mientras parecía atento a cualquier detalle con el automóvil aunque inalcanzable para él. Todo esto sin saber que a lo lejos era observado por el dueño del auto.
El hombre, en evidente estado de calle, se sentó cerca del lujos Mustang uno de los autos más cotizados. “Era un día normal para él, pero mira lo que hizo el dueño”, destacaban desde el programa Amor y Fuego.
El dueño del auto, conmovido por la escena, invitó al hombre a pasar un día diferente en su vida. Primeramente lo paseó en una juguetería donde le compró un auto similar, un detalle inolvidable y hasta gracioso. Pero además le cumplió el sueño de subirse a modelo deportivo y lo paseó largo rato por las calles.
El poder de las redes sociales
El buen samaritano quiso recompensar al hombre que ahora vive en las calles. En sus redes sociales mostró el momento en el que lo paseó a bordo del auto lujoso, pero también cuando lo llevó a una peluquería para cambiarle look.
Esta historia tuvo un final feliz, pues tras viralizarse, la familia del indigente que lo buscaba incesantemente y desconocía su paradero, logró ubicarlo después de un buen tiempo. “Una bañadita y a la casa”, bromearon los conductores del programa de Willax quienes celebraron esta anécdota.
